«Estamos muy orgullosos de haber promovido a tantos jugadores», dice Francisco Rubio, Gerente de Rugby de la UAR, al ser el país con el mayor número de graduados.

Argentina ideó sus planes de alto rendimiento en 2008, que entraron en funcionamiento en 2009. Muchos del equipo que viajó a ese primer Campeonato U20 en Gales se agregarían después de que terminara su carrera U20; nombres como Martín Landajo (84 caps) y Nicolás Sánchez (80) tuvieron carreras exitosas en su país y en el extranjero.

“Nuestro plan HP incluye en su camino a Pumitas, Argentina XV y sietes. Esto lleva a Jaguares, nuestros equipos de Super Rugby y Pumas ”, agrega Rubio.

Al mirar al equipo en Japón 2019, todos menos dos pasaron por la vía UAR y el programa HP: prostituta Santiago Socino y utilería Juan Figallo. «Santiago recurrió a la prostituta en el extranjero y Juan se fue poco después del Campeonato 2008, así que no trabajó con nosotros». Figallo se retiró del rugby de prueba en Japón, su tercer RWC.

«Sería una excepción si encontramos a alguien fuera de HP para Los Pumas», dice Rubio. «Los jugadores maduran en diferentes etapas, por lo que no es improbable, pero la exploración funciona muy bien».

Jugadores como Bautista Delguy, por ejemplo, aparecieron en cada paso del camino, jugando para Pumitas, Argentina XV, sietes, luego Jaguares y finalmente brillando en Los Pumas.

UN EJERCITO DE APOYO

El rugby a nivel de clubes en el país es muy fuerte, con un ejército de aficionados trabajadores que enseñan y preparan a miles de jugadores. Lo mejor se logra gracias a una gran red nacional.

Para compensar estos esfuerzos en los más de 650 clubes del país, la UAR ha estado trabajando incansablemente en programas de educación a nivel nacional. Antes de la pandemia de COVID-19, los entrenadores nacionales cruzarían la gran nación impartiendo cursos con buena asistencia. Hoy en día, las sesiones virtuales se han convertido en la norma y están llegando a más y más personas.

«Comprendemos claramente y agradecemos el papel que juegan los clubes y compartimos nuestra información con ellos», agrega Rubio.

«Uno se entera de un jugador a través de las conexiones del club en todo el país o los jugadores muestran su talento en diferentes niveles y luego son invitados a unirse al programa».

Antes del programa HP, el camino significaba un salto del club al nivel internacional. Ahora hay academias provinciales locales y cinco centros nacionales que ayudan a los jugadores a desarrollarse.

Los Pumitas existen desde 1972 y no está claro cuántos se pusieron la camiseta en el nivel U18, U19, U20 o U21 han llegado al equipo nacional completo, pero el número es ciertamente más de 200. El camino es más largo y mejor camino en estos días.

«El objetivo», dice Rubio, «es mejorarlos. Tienen sus virtudes y si pueden crecer en ellas, el programa está funcionando. La satisfacción viene de tener un buen equipo que cumpla con el plan «.

No se trata solo de ser buenos jugadores de rugby, ya que el programa HP espera más de los jugadores. Hay becas universitarias disponibles y el enfoque es mucho más integral.

“Ser un Pumita es el primer paso en un desarrollo a largo plazo para el jugador. Tener un Campeonato Mundial cada año es ciertamente importante para los jugadores, pero también es parte del camino ”, concluye Rubio.

Algunos de los graduados recientes más conocidos son Landajo, Sánchez, Tomás Cubelli, Nahuel Tetaz Chaparro, Ramiro Moyano, Javier Ortega Desio, Matías Orlando, Joaquín Tuculet, el actual capitán de Puma Pablo Matera (foto principal) , Santiago Cordero, Jerónimo de la Fuente, Julián Montoya, Matías Moroni, Facundo Isa, Guido Petti, Marcos Kremer, Emiliano Boffelli, Bautista Delguy, Santiago Medrano y Mayco Vivas. Tomás Lavannini protagonizó en 2012, pero ya había jugado a su primer Puma internacional y, por lo tanto, no se considera un graduado.

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