A gusto con el resultado, el desempeño y hasta la recepción jujeña en el primer partido de la Argentina en el país desde 2019, el debutante DT australiano advirtió sobre una cuestión mental.
Un entorno paisajístico espectacular. Una recepción cálida como la gente del interior sabe ofrecer. Un estadio casi completo. El reencuentro con el público al cabo de casi tres años. Y la victoria, clara, con superioridad en el juego. Salvo por los desgarros de Nicolás Sánchez y Tomás Cubelli, una bucólica tarde de los Pumas en Jujuy, con su 26-18 sobre Escocia en el primero de tres test maches. Casi todo era sonrisas, incluso del propio entrenador debutante, Michael Cheika, pero…
… el australiano no compra el paquete de buenas noticias sin revisarlo. Está claro que el estreno de su ciclo fue positivo y que, como todo comienzo, dispara la necesidad de ajustes para el futuro. Pero entre los puntos defectuosos uno sonó distinto en boca del DT. No uno técnico o táctico, de ejecución, sino uno mental. Psicológico. Y por ende, quizás más difícil de modificar.
“Las bases estuvieron bien. El scrum respondió y también en el maul nos fue bien, ante un equipo, Escocia, que es muy fuerte en esa faceta del juego”, rescató Cheika sobre el césped, apenas terminado el amistoso, pero de inmediato advirtió: “Debemos mejorar la disciplina y dejar de mirar el tanteador para enfocarnos en jugar”. Lo de la disciplina es cosa conocida, un defecto de larguísimo arrastre en los Pumas. Pero lo de seguir atacando a una potencia cuando se está venciendo por cierto margen… “Por momentos dejamos de arriesgar, y yo quiero que el equipo se anime a jugar, sin pensar tanto en el resultado”, estableció el director técnico. No es un punto menor, por cierto. Un cambio de mentalidad no es cuestión de un día al otro. De una semana a la otra.
La palabra de Cheika
“Es más difícil preparar un partido cuando uno se enfrenta con el mismo rival, porque el estudio es cada vez mayor. Tenemos que seguir reforzando nuestras bases y modificar algunas cuestiones específicas para sorprender a Escocia dentro de una semana en Salta”, admitió Cheika, que, sin embargo, quedó a gusto en general con la producción de los Pumas. “Fue el primer paso. Hubo algunas partes del juego que me gustaron, y algunas en las que tenemos que trabajar. Pero como dije antes del partido, debemos hacer las dos tareas: trabajar en el largo plazo y tratar de hacer lo mejor en el corto plazo”, señaló, con una visión extensa, en el inicio de un ciclo que concluiría en el Mundial Francia 2023.
Se fue a gusto el australiano en Jujuy. La pasó bien todos estos días. “Creo que hoy tuvimos un buen rendimiento, y festejamos delante de este público jujeño que tan bien nos trató durante esta semana”, se complació, como todos en la delegación argentina. Julián Montoya, entre ellos. “Estamos muy contentos de haber vuelto a jugar en Argentina y hacerlo con un triunfo. Tenemos que seguir trabajando porque hay muchas cosas por corregir, pero es momento de disfrutar. Y ya mañana, enfocarnos en el partido en Salta”, sostuvo el capitán, que dejó su lugar a los 19 minutos del segundo tiempo para el esperado retorno de su antecesor, y también hooker, Agustín Creevy.
Lo que dijo Montoya
“Estoy muy orgulloso del equipo, de los 23 que entraron hoy y de todos los que estuvieron entrenándose en la semana. Lo de hoy es un primer paso y tenemos que agarrar confianza desde ahí. Un montón de cosas salió como las habíamos practicado, pero también sabemos que tenemos que mejorar y en qué”, apuntó el reciente campeón de la liga Premiership, de Inglaterra, como estrella de Leicester Tigers.
Fuente: LA NACION – Fotos: PABLO GASPARINI – AFP – LA NACION Deportes – Videos: ESPN – LA NACION Deportes