Malas noticias en el mundo River: Matías Suárez no podrá estar con el plantel el próximo lunes para reintegrarse a los entrenamientos tras casi cinco meses de parate por la pandemia. Debido a un brote de 21 casos positivos de coronavirus en el barrio Cañuelas Golf de la ciudad de Córdoba, donde reside actualmente el delantero, deberá permanecer en su domicilio al menos por los próximos siete días, ya que el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) dispuso un cordón sanitario en el lugar.

Suárez decidió partir a Córdoba, su ciudad natal, en el inicio de la cuarentena y desde ese entonces se encuentra en el barrio privado junto a su familia. El atacante 32 años tenía todo planeado para viajar esta misma noche para Buenos Aires, tras conocerse ayer la confirmación del retorno de los entrenamientos a partir del próximo lunes 10 de agosto. Pero, ahora, tendrá que aguardar hasta el martes 11 para conocer si podrá reintegrarse a partir del miércoles 12 a las prácticas del equipo de Marcelo Gallardo.

«Matías vive en este lugar y se encuentra en su domicilio. A las 0 horas de hoy el COE Central de Córdoba dispuso un control sanitario de aislamiento, que va a durar siete días, en primera instancia. Son 300 familias las que habitan el barrio y hay una restricción para entrar y salir, aunque eso puede cambiar de acuerdo a los trabajos de campo de los sanitaristas y epidemiólogos», declaró el comisario local, Gonzalo Cumplido, en diálogo con TyC Sports.

Los cordones sanitarios que realiza el COE en todos los sectores donde se detectan brotes del virus implican que mientras dure la medida se establece la restricción de la circulación de personas al máximo, y en el caso de este country no podrá utilizarse la cancha de golf, canchas de fútbol, club house, piletas de uso común y demás espacios comunes del barrio. Además, podrá salir una persona por unidad habitacional por vez para buscar alimentos, medicamentos o insumos esenciales con fines de abastecimiento.

Pese a la situación, el comisario Cumplido anunció que puede llegar a realizarse una excepción en el caso de Suárez. «En esos 21 casos no está Matías. Hay veces que los tiempos se han extendido o acortado, todo depende de los resultados que vayan obteniendo. A veces, pueden flexibilizar la situación de algunas de las personalidades que figuran como esenciales, que también puede ser la del jugador de fútbol, porque acá también viven médicos», explicó.

Al día de hoy, los futbolistas de River continúan con tareas físicas a distancia bajo el seguimiento diario del cuerpo técnico en semanas que habitualmente tienen cuatro días de trabajo y tres de descanso. El equipo tendrá su primer partido oficial el 17 de septiembre ante San Pablo en Brasil por la tercera fecha del Grupo D y luego, el martes 22, tendrá que jugar en Juliaca frente a Binacional de Perú.

El caso de Robert Rojas: 22 horas en auto para regresar

De los seis extranjeros que tuvieron que retornar al país después de emigrar para pasar la cuarentena con sus familias, el caso más emblemático es el del paraguayo Robert Rojas. A mediados de mayo, el defensor tardó alrededor de 15 horas en llegar a su país en auto y debió cumplir el aislamiento obligatorio en un hotel de Asunción antes de emprender su rumbo hacia Concepción, su ciudad de origen, ubicada a 400 kilómetros de la capital.

En aquella oportunidad, con la ayuda de la Asociación Paraguaya de Fútbol, 11 autos diferentes emprendieron el rumbo hacia Paraguay con los futbolistas Junior Alonso (Boca), Antony Silva (Huracán), Adam Bareiro (San Lorenzo), Víctor Ayala (Gimnasia), Gabriel Ávalos (Patronato) y Marcelo Estigarribia (Colón). Pero, ahora, el Sicario vivió una odisea mayor: salió el viernes 31 al mediodia desde Asunción en el auto de su amigo Néstor Reyes y recién llegó el sábado a las 10 de la mañana a su departamento en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

¿Qué ocurrió? Sufrió una importante demora en el Puente Internacional San Ignacio de Loyola, que une la ciudad de Clorinda (Formosa) con la de José Falcón, ubicada en el Chaco paraguayo. Rojas se encontró con manifestantes que cortaban el paso en Clorinda, por lo que, entre el largo trámite migratorio y las interrupciones, tardó mucho más de lo habitual, al punto tal que debió cruzar la frontera a pie.

Finalmente, al poder llegar al territorio argentino, un auto de River lo recogió para emprender el camino desde Formosa hasta Buenos Aires, que incluyó sucesivas paradas entre la cena, el desayuno y cargas de combustible. Tras 22 horas, llegó a la Capital el sábado 1° de agosto e inició el asilamiento preventivo de 14 días que dispone el Ministerio de Salud para aquellos que reingresan al territorio nacional y recién el 15 podrá sumarse a las prácticas.

Los extranjeros, caso por caso: ¿quiénes no estarán?

• Nicolás De La Cruz (Uruguay): regresó el viernes 24 de julio al país en Buquebus y cumplirá los 14 días de aislamiento el viernes 7, por lo que estará disponible.
• Rafael Borré y Jorge Carrascal (Colombia): ambos retornaron a la Argentina el sábado 25 en un vuelo de repatriación, por lo que terminarán el aislamiento el sábado 8 y podrán estar con el equipo.
• Paulo Díaz (Chile): al igual que los colombianos, regresó al país el sábado 25 en un vuelo humanitario y cumplirá los 14 días de cuarentena el sábado 8. Estará.
• Juan Fernando Quintero (Colombia): recién pudo volver al país en un vuelo de repatriación el pasado jueves 30 de julio, por lo que cumplirá con el aislamiento recién el jueves 13 de agosto.
• Robert Rojas (Paraguay): emprendió el viaje el viernes 31 por vía terrestre y la travesía en auto duró 22 horas, por lo que llegó al país el sábado 1° de agosto. Se reencontrará con el plantel el sábado 15.