El inicio de la semana comenzó alterado en el Mundo Boca. Luego de una mañana repleta de rumores vinculados a una gran cantidad de jugadores afectados por Covid-19, el club dio a conocer un comunicado en el que reconoce un «brote de contagio» interno desde el domingo y en el que confirma que todos los futbolistas serán aislados en sus respectivas habitaciones. Al menos cinco futbolistas, un utilero y un médico manifestaron síntomas compatibles con la enfermedad durante el fin de semana, lo que activó el protocolo y derivó en una decisión de peso: por precaución, el técnico Miguel Ángel Russo salió de la burbuja sanitaria.
De acuerdo a la información a la que accedió LA NACIÓN, Esteban Andrada, Javier García, Franco Soldano, Leonardo Jara y Carlos Izquierdoz son algunos de los que presentaron síntomas leves. El informe que proporcionó la institución de la Ribera no detalla los nombres ni la cantidad de afectados. Aunque, según trascendió, serían alrededor de 20 contagiados, sumando empleados del hotel.
Según explican desde el club, la información completa no se otorga ya que en 72 horas, el tiempo que el plantel estará sin entrenar, volverán a realizar tests PCR para terminar de sentenciar quién está infectado y quién no. ¿Por qué? Por ejemplo, vienen de las experiencias de Walter Bou y Lisandro López, quienes inicialmente dieron resultado positivo, pero con la inmediata contraprueba se comprobó que, en realidad, eran negativos. Los test rápidos pueden arrojar resultados falsos. Los PCR, no.
De acuerdo a lo informado por el club, desde que comenzaron los entrenamientos presenciales en contexto de pandemia por Covid-19, «el plantel de Boca fue evaluado dos veces por semana y ya se cumplieron más de 500 testeos. Los días 18, 21 y 26 de agosto, todos presentaron PCR negativo y el 24 de agosto los test rápidos enviados por AFA también resultaron negativos».
Además, más allá de los jugadores, están aisladas otras dos personas que están dentro de la burbuja sanitaria que armó el club en Ezeiza (entre su complejo de entrenamiento y el hotel cercano donde se hospeda). Uno sería integrante del cuerpo médico y el otro, uno de los utileros, cuyos nombres tampoco trascendieron.
Boca tenía planeado hisopar a todo el plantel este martes, pero este escenario modificó todo lo que estaba proyectado.
En caso de que los nuevos análisis del jueves ratifiquen el positivo de Andrada y García, los dos quedarían casi descartados del partido contra Libertad, programado para el 17 de septiembre, debido a que recién cumplirán los 14 días de aislamiento tres días antes de ese encuentro. En ese escenario, Boca viajaría a Asunción con Agustín Rossi como arquero titular y Manuel Roffo, como suplente.
Todo es contrarreloj. Ese 17 de septiembre Boca deberá visitar a Libertad en Asunción, por la tercera fecha del Grupo H de la Copa Libertadores, que precisamente lidera el conjunto paraguayo que dirige Ramón Díaz.
No solo eso. De acuerdo al calendario que oficializó la Conmebol, apenas un mes y cinco días más tarde culminará la etapa de grupos. En resumen: después de cuatro meses y 19 días sin entrenamientos grupales, Boca tiene 24 días para que su plantel se ponga en forma, para que luego dispute cuatro partidos en 35 días y los primeros tres en apenas 12 (después de visitar a Libertad irá a Medellín a jugar el 24/9 con el DIM, y cinco días más tarde recibirá a Libertad). Finalmente, cerrará también de local el 22 de octubre frente a Caracas. Con un dato más: los tres rivales del Xeneize llevan más tiempo entrenándose. Libertad volvió a jugar de manera oficial el 23 de julio, Caracas se entrena en grupos reducidos desde el 24 de junio y el DIM, desde mediados de julio.
El comunicado de Boca
Para extremar las medidas de seguridad sanitaria, se aísla en sus respectivas habitaciones a toda la delegación y se suspenden los entrenamientos por 72 horas, período tras el cual se realizarán nuevos tests PCR.
Con respecto a los entrenamientos en contexto de pandemia por Covid-19, Boca Juniors informa que el plantel profesional de fútbol del club ha sido evaluado dos veces por semana desde el reinicio de la actividad presencial y ya se cumplieron más de 500 testeos. Los días 18, 21 y 26 de agosto, todos presentaron PCR negativa y el día 24 de agosto los test rápidos enviados por AFA también resultaron negativos. Esta evaluación incluyó a todo el personal del Centro de Entrenamiento de Ezeiza así como también al personal del hotel donde la delegación se encuentra alojada.
Durante la noche del viernes 28 de agosto se detectaron síntomas compatibles con Covid 19, por lo que el día siguiente se realizaron tests de hisopado rápido, que a algunos integrantes del plantel les dio resultado positivo, por lo que el domingo 30 se repitieron los tests PCR a todos los integrantes de la delegación, arrojando la aparición de un brote de contagio.
A excepción de un jugador, se pudo identificar previo a la aparición de síntomas a aquellos que dieron positivo, estando al día de la fecha aislados en la concentración, bajo estricta supervisión médica, kinésica, nutricional y psicológica. El estado de salud es excelente en todos los casos, esperando los tiempos sanitarios y médicos para el pronto retorno a la actividad.
Por estos motivos, y para extremar las medidas de seguridad sanitaria, se aísla en sus respectivas habitaciones a toda la delegación, y se suspenden los entrenamientos por 72 horas, tras lo cual se realizarán nuevos tests PCR.
Alerta Russo
Según le confirmaron a LA NACIÓN, por su condición de paciente de alto riesgo, el técnico Miguel Ángel Russo salió de la burbuja sanitaria de Boca. El entrenador tiene 64 años y superó un cáncer de vejiga y próstata a comienzos de 2018 que en la actualidad le demandan controles de rutina. El hombre extrema los cuidados e incluso se traslada del hotel al centro de entrenamiento en su auto particular, y no en los micros que transportan al plantel. Pero de todas maneras, se tomó la decisión de que ni siquiera comparta el hospedaje con el grupo. De todas maneras, según indican desde el cuerpo técnico, Miguel estará en los entrenamientos cuando se retomen.
El caso Marcone
Iván Marcone continúa aislado y recuperándose, después de haber dado positivo hace 12 días. El volante central tuvo una tarea intensa durante la cuarentena. Nacido en el sur del conurbano bonaerense, la pandemia de coronavirus y, por ende, la situación crítica en muchos barrios humildes, lo activaron a pensar todavía más en las necesidades sociales.
Aunque su carrera fue creciendo, jamás olvidó sus raíces y estuvo encima de aquellos que requirieron una ayuda: ser presidente del club social y deportivo Belgrano, de Sarandí, donde dio sus primeros pasos en el fútbol (Rodrigo De Paul fue otro de los que creció allí), fue una manera de estar pendiente permanentemente. Es por eso que, además de ponerse los pantalones cortos en su casa para entrenar a través de Zoom junto al plantel, también se puso los largos para colaborar en los lugares más carenciados.
Fuente: Pablo Lisotto – LA NACION DEPORTES – Fotos: Crédito: Javier García Martino / Prensa Boca – rédito: Prensa Boca / Javier Garcia Martino – Photogamma – LA NACION DEPORTES