El seleccionado, cuyo plantel reside mayormente en Buenos Aires, quería instalarse en Rosario para entrenar de cara a los Juegos Olímpicos, pero la provincia le puso freno. El aumento de casos de Covid-19 en el sur de Santa Fe en los últimos días fue determinante.
Las Leonas buscan locación. Aunque esta vez, pese al enorme vínculo que las une con Rosario por afecto y por historia, la ciudad no las recibirá. Es que la provincia le bajó el pulgar al pedido que se oficializó sobre el fin de semana, porque no es una prioridad en medio de tantos problemas que atrae aparejados la pandemia del Covid-19. Rosario siempre estuvo cerca. Y lo sigue estando, aunque sin quórum para esta ocasión. Si bien mañana habrá algunas charlas más, la decisión está tomada. Es un “no” que por supuesto puede reconsiderarse a cada momento pero que hoy, con este estado de situación y los aumentos de casos de coronavirus, exponencial en Buenos Aires y bastante considerable y peligroso en el sur de Santa Fe, parece inamovible. No es en detrimento de Las Leonas, que tantas alegrías generaron visitando la ciudad, sino una consideración fuerte, medida, en una escala de valores y prioridades en medio de una situación excepcional.
El rumor de que Las Leonas querían entrenar en el interior venía siendo cada vez más fuerte en los últimos 10 días. Después de que los atletas olímpicos o con chances de serlo en los postergados Juegos de Tokio 2020 fueron habilitados para entrenar, se supo que el DT Carlos Retegui tenía una idea clara: no arriesgar a sus jugadoras en la circulación por la Capital Federal, yendo a entrenar al Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (Cenard), la casa habitual del seleccionado. Los Leones sí lo están haciendo allí, como otros equipos nacionales y atletas individuales. Pero la idea del Chapa era (y es) moverse. De hecho, así lo adelantó en una nota a TyC Sports hace muy poco, después de que las chicas se hicieran los hisopados correspondientes y mientras se encuentran en cuarentena antes de saber cuál es el nuevo horizonte. La primera opción fue Mar Del Plata, un sitio que el entrenador elige cada vez que quiere llevar adelante una concentración. Fue pulgar abajo. Se pensó en Santa Fe, en la capital, y fue también un “no”. Ahora la opción fue Rosario. Y una nueva negativa. ¿Se irán a Córdoba?
Desde la provincia no veían con malos ojos la posibilidad de albergar a las chicas por un tiempo. De hecho se analizó fuertemente la posibilidad de que lo hicieran en la cancha nueva de la Asociación Santafesina (de agua, de las mejores de la región) y utilizando las instalaciones del Instituto de Educación Física capitalino. Con protocolos ya preparados, no era una mala opción. Se optó por esperar un poco más y así, tras aquello, que también fue coincidente con la habilitación de los entrenamientos de los olímpicos y paralímpicos de la provincia, surgió Rosario. La idea prendió rápido luz verde en las áreas involucradas de la Municipalidad, pero esas ganas chocaron con la negativa provincial. De hecho la Asociación de Hockey del Litoral, igual, con poca o nula injerencia en la decisión final, no lo veía mal. Si se atenían a estrictas medidas protocolares, si el equipo, como se dijo, cumplía con el aislamiento en el hotel Howard Johnson de Funes, donde pretendía alojarse, y sólo se movía entre ese sitio y el Estadio Mundialista estaba bien. Siempre y cuando los controles sanitarios sobre el plantel, cuerpo técnico y personal involucrado en traslados y cancha fuesen frecuentes.
Si no hubiera habido un incremento considerable de casos en la última semana en el sur santafesino y si en Buenos Aires el pico no se hubiera disparado como se disparó, quizás se estaría hablando de otra cosa en esta nota. A la provincia no le hace gracia decirles que no a las chicas pero entiende de prioridades en un contexto que tiene otras urgencias. El equipo ni siquiera tiene hoy, por ejemplo, una jugadora local, lo que quizás hubiese impuesto un mínimo compromiso más de reconsideración. Para colmo, ese mismo día en el que desde la Confederación Argentina de Hockey (CAH) oficializaban el pedido, el gobernador Omar Perotti visitaba el peaje de General Lagos para solicitar un endurecimiento de los controles en los ingresos desde Buenos Aires, para evitar que el virus se propague más en Santa Fe, sin contar las consideraciones previas que hizo. El fallecimiento del ex mandatario socialista Hermes Binner dilató aún más el asunto porque la dirigencia local del partido entró en duelo el viernes y poco más interesó tras el deceso de semejante figura política. Para mañana hay promesa de alguna charla más entre el secretario de Deportes local y la CAH, pero mientras la provincia no cambie de opinión, ínfimo es lo que hay para hacer.
El vínculo de Las Leonas con Rosario es indestructible. Por historia y por alegrías, además de porque en la ciudad nació la mejor jugadora de hockey de todos los tiempos, Luciana Aymar, quien junto a Ayelén Stepnik, además, fue parte de la camada fundacional del equipo que lleva este nombre, allá por el 2000. Desde entonces jugaron por primera vez un Champions Trophy en la Cuna de la Bandera en 2004 (en Jockey) y luego, desde el 2010, el amor no paró de crecer. Campeonas en el inolvidable Mundial de ese año (Estadio Mundialista), campeonas de Champions Trophy 2012 y campeonas de Liga Mundial 2015, sin contar las sucesivas ocasiones en las que llegaron a prepararse para otros compromisos, con series amistosas incluidas.
Sin embargo, esta situación es distinta, tan excepcional que sólo invita a la mismísima excepción. Parece loco que haya que rechazarlas como medida de prevención y en el marco de otras prioridades. Aún así, desde la CAH no tienen rencor ni nada por el estilo. Entienden que entre las posibilidades un “no” era muy factible por la emergencia del país y del mundo. Saben que, pese a tener ya algunos clubes abiertos y muchas actividades liberadas, cada provincia debe velar por lo suyo. De fondo y si bien Las Leonas como todo deportista de alto rendimiento están sanas, fuertes y permanentemente monitoreadas, temen que surja un caso en torno al seleccionado o el personal que asiste al plantel y que este quede en el foco de la tormenta, en esta “famosa” caza de brujas y estigmatización que tanto creció en torno a la pandemia.
Rosario no tiene circulación comunitaria de Covid-19, como la mayoría de pueblos y ciudades de la provincia. La apertura de varias actividades, incluso la posibilidad de que sus olímpicos y paralímpicos vuelvan a entrenar (los nadadores, que son mayoría, lo hacen en el Club Provincial), hizo posar los ojos de la CAH nuevamente en un sitio que a Las Leonas les sienta bárbaro. Pero esta vez no podrá ser. La respuesta fue “no”. Si el marco cambia para bien quizás se revea. Aunque es complicado.
Solo análisis en el Cenard
El 12 de junio, la Jefatura de Gabinete de la Nación dio a conocer el DNU que les permite a los atletas olímpicos y paralímpicos entrenar después de casi tres meses de confinamiento obligatorio. Sin embargo, Las Leonas sólo fueron al Cenard a testearse. La idea del entrenador Carlos Retegui es instalarse en el interior.
Fuente: Vanesa Valenti – La Capital – Ovación – Foto: La Capital Ovación