Diego Schwartzman consiguió este miércoles su cuarta clasificación consecutiva a tercera ronda del Abierto de Australia, gracias a su categórico triunfo de 6-2, 6-0, 6-2 ante el francés Alexandre Muller, Lucky Loser ante la baja de Federico Delbonis y quien venía de superar en primera ronda al también argentino Juan Ignacio Londero.
“Me esperaba un partido más duro del que fue. Me deja contento haber jugado poco tiempo”, aseguró sobre ganar en una hora y 32 minutos. “Con Londero, a Muller lo vi que jugaba por abajo, que le gustaba mover rápido la pelota, intentar ir a la red. Un juego muy lindo, pero sabía que si yo estaba firme en mis defensas y mis salidas de su saque a él le iba a costar mover la pelota con mucha precisión, y creo que lo que pensé antes del partido fue saliendo. Él cometió muchos errores. Y yo estaba muy fino”.
El primer triunfo del ‘Peque’ en segunda ronda de este evento se concretó en la edición del 2018 (v. a Ruud). Y desde entonces nunca ha fallado en su intención de clasificar a tercera ronda del primer Grand Slam de la temporada. Este miércoles en la 1573 Arena estuvo lejos de quedarse sin su boleto tercera ronda de un Grand Slam por undécima vez en su carrera.
El momento más adverso para el diestro de 28 años, por decirlo de alguna manera, sucedió en el sexto juego de la primera manga cuando tenía ventaja de 4-1. Y luego en el octavo game del tercer parcial cuando sacaba para partido. Su altísimo nivel con la devolución fue justamente el que hizo la diferencia en su primer duelo con el francés a nivel de gira.
Schwartzman, octavo preclasificado del certamen, generó 15 oportunidades de ruptura, y cristalizó nueve. Luego de diez tiros ganadores, 13 errores no forzados y de un 75% de puntos ganados en la red (6/8), Diego cerró su tercer triunfo de la temporada para quedar a uno más de los 40 en su carrera en Grand Slams, una cifra que solo han alcanzado seis tenistas de su país (Guillermo Vilas, Juan Martín del Potro, David Nalbandian, Juan Ignacio Chela, Guillermo Cañas y Guillermo Coria).
Por ahora firma la No. 39, siete años después de conseguir la primera (v. a Elias en Roland Garros 2014). Antes de intentar llegar el viernes a la No. 40, Schwartzman se animó a elegir las tres más especiales de su carrera en este tipo de eventos.
“La No. 1, la de Thiem en Roland Garros del año pasado porque con esa entré al Top-10. Después, en el US Open 2017 cuando le gané a Cilic. Le gane jugando muy muy bien. Y la tercera con Zverev en octavos del US Open 2019, me puso muy feliz porque podía volver a un lugar alto”, aseguró ‘El Peque’, que también seleccionó su triunfo ante Kevin Anderson, en octavos de final de Roland Garros 2018, como uno de sus más especiales en majors.
Su próximo rival será el ruso Aslan Karatsev, quien viene de ganar la ATP Cup con su país y de vencer a Egor Gerasimov por 6-0, 6-1, 6-0 en segunda ronda del Australian Open. Será la primera vez que ‘El Peque’ mida al nacido en 1993 en Vladikavkaz y quien ocupa el puesto No. 114 del FedEx ATP Rankings. Un triunfo del argentino lo ayudaría a clasificar a octavos del certamen por tercera vez (también en 2018 y 2020) y por séptima vez en Grand Slams.
“A Karatsev no lo conozco mucho, no coincidimos en los torneos en los que juega cada uno. Sé que le pega muy fuerte a la pelota, que no le gusta pasar muchas pelotas ni le gusta entrar en defensa en el punto. Así que voy a ir con casco a mi próximo partido a atajar bombas”, aseguró entre risas el bonaerense. “Trataré de hacer un juego sólido y ponerlo molesto para que cuando quiera atacar no lo haga muy cómodo”.
Fuente: ATP Staff . Foto: © Getty Images – ATP TOUR