Fue en diciembre de 1987. Gabriela Sabatini, que por entonces tenía 17 años (¡17!) ganaba en el Buenos Aires Lawn Tennis Club su quinto título como profesional al ganarle a la alemana Isabel Cueto. Aquel torneo jugado hace 34 años sería el último WTA Tour jugado en nuestro país hasta el regreso previsto para la primera semana de noviembre, nuevamente en la Catedral del tenis en Palermo. El miércoles se presentó el flamante Argentina Open en su versión femenina, un WTA de la serie 125, organizado por la empresa Tennium, la misma que produce el ATP 250 de febrero en Buenos Aires.

A menos de cuatro semanas del comienzo de la prueba, hay mucho entusiasmo. La lista de inscriptas para el certamen principal tiene en lo más alto a Nadia Podoroska: la rosarina, como 36a del ranking, debió recurrir a una invitación para jugar este tipo de torneos, reservados en principio para tenistas con un ranking más bajo. No tiene ninguna obligación de jugarlo, pero pesaron más las ganas de volver a ser parte de un WTA en nuestro país. En principio, está previsto que el certamen se juegue durante tres años, con opción a renovarlo.

La segunda jugadora en el cuadro es la egipcia Mayar Sherif, 72a del ranking y en pleno ascenso. En cuanto a las invitadas, está asegurada la participación de la juvenil argentina Solana Sierra, que viene de llegar a las semifinales en el torneo junior del US Open. La organización le extendió otro ‘wild card’ a la andorrana Victoria Jiménez Kasintseva, de 16 años y número 1 del mundo junior, como otra de las atracciones del certamen. Jiménez fue campeona juvenil del Abierto de Australia 2020, y este año alcanzó la semifinal en Wimbledon y los cuartos de final en Roland Garros y el US Open. Queda una invitación disponible reservada a otra jugadora argentina, que surgiría entre Paula Ormaechea y Lourdes Carlé. Más: el reglamento permite hasta dos invitaciones para tenistas que están dentro del Top 50, y en los próximos días podría sumarse otra figura ubicada dentro de las 50 mejores.

La entrega del premio a la campeona -una copa con un mate labrado, similar a la que se entrega en el ATP porteño- estará a cargo de Norma Baylon, pionera del tenis femenino en la Argentina y que llegó a ser considerada entre las 10 mejores del mundo a mediados de los años sesenta, cuando el deporte aún era amateur y no había rankings oficiales. “Es un honor para mí, un reconocimiento hermoso. Estoy muy orgullosa y agradecida. Este tipo de campeonatos nos van a ayudar a que las chicas que están en otros deportes vuelvan al tenis, ojalá que nazcan muchas más Gabrielas Sabatinis”, expresó Baylon, que llegó a ganar un Olimpia de Oro como deportista del año en 1962, y de hecho, fue la primera mujer en recibir ese galardón. A propósito de Sabatini: la mayor tenista de la historia de nuestro país se sumó a la presentación con un mensaje de video.

Mientras tanto, en estos días se realiza el Pre-Tournament, que contó con 90 jugadoras. La ganadora de esta prueba obtendrá una invitación al cuadro mayor del WTA, mientras que la finalista de ese torneo accederá a la qualy.

“En algunos casos hubo que convencer a las chicas de que podían jugar, animarlas. Hay muchas más, pero esto ayuda para que la rueda se ponga en marcha. Tener el modelo de Nadia (Podoroska) impulsa a las demás para que vean que se puede, que las cosas llegan con trabajo y de manera ordenada”, contó Florencia Labat, que en su etapa como jugadora llegó a ser Top 30 y disputó varias series de la ex Fed Cup -hoy Billie Jean King Cup-.

El 31 de octubre comenzará la acción desde las 11 con la disputa de la jornada de clasificación, mientras que la acción en el cuadro principal comenzará el lunes 1 de noviembre, con un aforo permitido del 50 por ciento. ¿Podría aumentarse la cantidad de espectadores? “Es difícil prever con el tema de la pandemia, pero si todo sigue como está, se podría llegar al cien por ciento. Que el torneo se juegue al aire libre es algo que ayuda mucho”, expresó Matías Lammens, el ministro de Turismo y Deportes, que acompañó la presentación del certamen.

“Es importante un torneo como éste porque genera muchas condiciones para las chicas, para fomentar el desarrollo del tenis femenino. Estar de vuelta en el calendario de la WTA es algo para celebrar. Ojalá que este proyecto tenga una continuidad por muchos años”, ponderó Lammens.

En cuanto a las entradas, está prevista una promoción válida hasta el 20 de este mes, con entradas generales que van desde los 700 a los 1500 pesos por jornada, mientras que los palcos por día van desde los $6000 a los 10.000 pesos. Las localidades pueden adquirirse a través de Ticketek.

Tal como suele suceder con el Argentina Open masculino, el WTA 125K será transmitido por TyC Sports, con un partido por jornada de lunes a viernes, las semifinales y la final, y todos los partidos que dispute Nadia Podoroska.

Fuente:José Luis Domínguez  LA NACION – Fotos: Roberto Castro/Prensa Argentina Open – LA NACION Deportes – Tweets Argentina Open@ArgentinaOpen – LA NACION Deportes