Aun sin la presencia de Jaguares XV, hay mucho para observar en el estreno de la Superliga Americana de este lado de la cordillera. Los argentinos constituyen el 41,66% de los jugadores inscriptos en los seis equipos participantes, de los cuales 24 estarán en la jornada inaugural.

Por un brote de coronavirus en el plantel de Cobras Brasil XV (11 jugadores dieron positivo), el equipo argentino vio postergada su presentación. Entonces, Peñarol (Uruguay) y Olimpia Lions (Paraguay) abrirán el certamen este martes a las 16.30 y Selknam (Chile) vs. Cafeteros Pro (Colombia) se jugará en el horario central de las 20, ambos con transmisión de ESPN desde el estadio La Pintana de Santiago, donde se juegan las dos primeras fechas.

“Son jugadores que no iban a tener suficientes minutos en Jaguares XV y queríamos verlos competir contra los que van a ser parte de esta pretemporada. Queríamos verlos ganar más minutos en cancha y competir”, explicó Carlos Ignacio Fernández Lobbe, entrenador de Jaguares XV. “No significa que no sigan estando en la consideración de los entrenadores. Les dije que se sigan esforzando igual, porque va a haber más competencia en los distintos seleccionados en la segunda mitad del año y los vamos a estar mirando”.

La Argentina es líder indiscutido en la región y su presencia en los demás equipos tiene el doble objetivo de potenciar el certamen, por un lada, y de darle competencia a un grupo grande de jugadores que buscan una salida profesional y, al mismo tiempo, siguen en el radar de los seleccionadores nacionales, por el otro. Una relación simbiótica: Sudamérica necesita de la Argentina para crecer deportivamente, la Argentina necesita de Sudamérica para tener un certamen profesional, máxime con la caída del Super Rugby. La apuesta es a largo plazo. Por lo pronto, países como Uruguay y Chile están haciendo bien los deberes al interior en los últimos años y Colombia, todavía lejos, está apostando fuerte por el rugby.

Además de los 30 Jaguares hay 45 argentinos distribuidos en las demás franquicias. Es decir que de los 180 jugadores que hay en la burbuja (30 por equipo), 75 son de este país. La que más tiene es Olimpia Lions, que cuenta con 19 argentinos de los cuales 14 serán titulares en el debut. Cafeteros tiene 11 (todos en acción el martes) y Selknam, Peñarol y Cobras, cinco cada una. Su presencia es inversamente proporcional al nivel de desarrollo que hay en cada país.

Los seis entrenadores argentinos

Incluso los seis entrenadores de las seis franquicias son argentinos: Rodolfo Ambrosio en Cafeteros, Pablo Bouza en Peñarol, Emiliano Bergamaschi en Cobras, Nicolás Bruzzone en Selknam y Raúl Pérez en Olimpia Lions, además de Fernández Lobbe en Jaguares.

El método de selección fue curioso: los cinco entrenadores de las franquicias extranjeras se reunieron y se distribuyeron los jugadores argentinos de común acuerdo, la gran mayoría surgidos de una lista proporcionada por la UAR, aunque no todos.

El común de los expatriados es de jugadores que estuvieron recientemente desarrollándose en las distintas academias del país, cumplieron su etapa en los seleccionados juveniles y todavía no completaron su proceso de desarrollo; muchos estuvieron el año pasado en Ceibos, antes de que la explosión de coronavirus obligara a la suspensión del certamen apenas disputada una fecha y media; siguen estando en la mira de los seleccionadores nacionales.

El caso más llamativo es el de Javier Díaz (Olimpia), pilar izquierdo tucumano captado por Mario Ledesma, con vasta experiencia en el Super Rugby y tres Test Matches con los Pumas en 2018. También hay un par con pasado en Pumas 7s, como Maximiliano Filizzola (Selknam) y Conrado Roura (Peñarol).

Hay dos casos curiosos que no entran en la regla pero cabe destacar: dos jugadores formados en el rugby de Buenos Aires, pero nacidos en el exterior y con presencia en sus seleccionados de origen. Son el uruguayo Facundo Gattas, de Hindú, y el brasileño Yan Rosetti, de CUBA.

Antes de comenzada la versión 2020, finalmente trunca, hubo un conflicto entre Sudamérica Rugby y los clubes de Buenos Aires, ya que estos temían por la salida de sus jugadores y la pérdida de competitividad del torneo de la URBA. Por ello se instauró una regla de que no se podía convocar a más de dos jugadores por club. Ante la falta de rugby a nivel local, esta regla quedó en desuso. No obstante, la gran mayoría de los emigrados son del interior: tan sólo 10 de los 45 (el 22,22%) son de clubes de la URBA. Se estima que podrán volver a sus equipos una vez finalizada la liga, a mediados de mayo.

La presentación de Jaguares, finalmente, ocurrirá el domingo, cuando a las 20 se enfrente a Cafeteros Pro. Mientras tanto, espera por la reprogramación del partido ante Cobras, equipo que llegó el lunes a Santiago con 33 de los 38 integrantes del plantel, entre jugadores y staff técnico

El certamen se disputará a dos ruedas todos contra todos (10 partidos), la primera entre Santiago y Valparaíso y la segunda en Montevideo, donde también se jugarán semifinales y final, pactada para el 15 de mayo. Si el coronavirus lo permite, claro.