El conjunto millonario se impuso por 4-1; se repuso tras el empate 1-1 de Braida para los marplatenses y con una exquisita conexión colombiana volvió a respirar con el gol de Borré; lo definió sobre el final con Paradela y ex Belgrano para sellar el resultado.
Técnica, inteligencia, talento, gambeta, movilidad y definición. En tan solo media hora de juego, Matías Suárez expuso todo lo que River lo extrañaba. No hay un jugador como él en el plantel. Ningún otro delantero es tan completo. Ya sea como extremo, segundo delantero o mediapunta, el cordobés entiende a la perfección cómo lucirse y potenciar al equipo. Decidir bien forma parte de su rutina. Y el momento para volver después de perderse ocho partidos no pudo ser más oportuno: en su cumpleaños número 33, ingresó con Aldosivi para construir el tercer gol y marcar el cuarto para definir el triunfo por 4-1 en el Monumental y llevar tranquilidad al asegurar el boleto a los cuartos de final de la Copa de la Liga Profesional.
River llegó con la soga al cuello a la última fecha de la Zona A. Necesitaba derrotar a Aldosivi para alcanzar la clasificación sin depender de otros resultados. Y el partido tuvo una dinámica impensada. Tras 20 minutos de intensidad y vehemencia del equipo de Marcelo Gallardo en los que abrió el marcador con un penal de Gonzalo Montiel, en el resto del partido el dominio de la pelota estuvo en manos del elenco de Fernando Gago, que terminó con el 59% de la posesión. El Tiburón jugó un gran primer tiempo y luego le faltó ingenio y explosión para ser más punzante y peligroso.