En la Liga se mide todo. Tener más tiempo la pelota no garantiza el éxito y lo mismo pasa con los remates al arco. Dónde juega el futbolista que mejor la pasa, cuál es el arquero con más atajadas y otras rarezas que se desconocen pero los DT miran mucho.

Parece un axioma en el fútbol: a mayor posesión del balón, más posibilidades de ganar. Manchester City fue campeón de la Premier League en la temporada 2021/22 con 68 por ciento de posesión; Real Madrid se llevó LaLiga, con 60,1 por ciento, cuatro menos que el Barcelona, segundo.

Pero siempre hay excepciones y nuestro fútbol doméstico lo es: ganan los que no tienen el balón.

Desde hace dos décadas, y en especial los últimos años, el juego se inundó de datos de todo tipo. Los utilizan los directores técnicos, los analizan los periodistas, los consume el futbolero. Y entre los miles de números que se pierden en la vorágine de 14 partidos por fecha, a veces sin descanso, hay un dato que llama la atención respecto a la posesión del balón.

También, después de 16 fechas, ya se puede hacer un balance para conocer cuáles son los equipos que intentan rematar, los que mejor direccionan al arco, los que más faltas hacen y aquellos que más reciben. Pero la lista de «números locos» sigue.

Este informe sirve para desmenuzar y visibilizar pequeños detalles a partir de los informes que entrega fecha tras fecha la Liga Profesional de Fútbol.

Los que más tienen la pelota, ¡son los que menos ganan!

En Argentina, el que tiene la posesión del balón generalmente no gana. De los 223 partidos disputados en las 16 fechas jugadas hasta el domingo 28 de agosto, solo 47 equipos que tuvieron mayor porcentaje de posesión ganaron el partido; 97 perdieron y 73 empataron. Además, hubo 6 partidos en los que se igualó la posesión.

Lo más curioso es que en las mayores diferencias del torneo, sólo un equipo ganó. En el encuentro entre River y Sarmiento se registró la mayor diferencia: 82% a favor del Millonario, y ganó Sarmiento 2-1. Además, River tuvo 28 intentos de remate (4 al arco) contra 5 (3 al arco) del Verde. Ningún equipo en todo el torneo tuvo tantos intentos.

“Le dimos la facilidad a ellos, que no nos generaron situaciones, de anotarnos dos goles en 45 minutos. Luego se defendieron y esperaron con mucha gente. Si no lo podés quebrar, tenés que tener paciencia para mover la pelota hasta que llegue el momento. Con dos goles abajo fue diferente, necesitábamos lucidez, creatividad y precisión en espacios reducidos y no lo tuvimos, por eso no pudimos generarle peligro en casi ningún momento del partido”, explicó Marcelo Gallardo, técnico de River, tras la derrota.

La otra gran diferencia fue en el partido entre Barracas y Boca en cancha de All Boys. El Xeneize, que tuvo 79 por ciento de posesión, ganó 3 a 1. En cambio, Independiente, que tuvo el 78 por ciento de posesión, perdió 3-1 con Patronato.

El día que River tuvo la pelota pero festejó Sarmiento

El curioso caso de Atlético Tucumán

Otro detalle y ya vinculado con la posición en la tabla del torneo es que el líder Atlético Tucumán tuvo más posesión sólo en tres de los 16 partidos que jugó, y con un promedio de 43,2 por ciento se ubica en el 24° puesto de este rubro, superando a solo cuatro equipos, entre ellos Gimnasia y Esgrima de La Plata, otro de los animadores del campeonato.

Lanús, en cambio, que marcha último en las posiciones, ganó la posesión en 12 de los 16 encuentros y con 54,1 por ciento se ubica en el séptimo puesto del «torneo de la posesión». Otro que aparece en los primeros lugares de los que cuidan la pelotita es Vélez, que a la hora de los puntos está en el fondo de la Liga Profesional.

¿Tiene una explicación? Sí, lo que la tribuna llama el “toquecito intrascendente”. En especial cuando se ubican en el top ten de pases defensores o volantes de contención que distribuyen el juego hacia atrás y no hacía adelante. En otros casos, también, imprecisiones o fallas en la zona de definición.

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Pasarla mucho y bien no garantiza el éxito

No resulta extraño que dos de los cinco equipos que más efectividad en pases tienen ocupen los peores lugares en la tabla. Y uno de los dos, Vélez, está tercero en el promedio de pases por partido: el Fortín suma 479,2 pases por partido, detrás de River y Racing, con una efectividad del 79 por ciento, igual que Lanús, último en las posiciones. En esa materia, Boca tiene un 82 por ciento de efectividad mientras que Racing y River suman 80.

Ninguno de los equipos que a la fecha 16 ocupaban las primeras cuatro posiciones de la tabla de posiciones (Atlético Tucumán, Gimnasia, Huracán y Godoy Cruz) aparecen como destacados en la categoría de promedio de pases y efectividad.

Alan Varela, de Boca, es el futbolista de la Liga Profesional que mejor la pasa, con un promedio de efectividad de 89,8 por ciento de pases correctos. Es decir, de 10 pases erra tan solo 1. Pol Fernández, su compañero en el Xeneize, acumula un 85,1 y figura en un top ten donde se destacan Máximo Perrone (Vélez), Jonatan Gómez (Racing), Enzo Pérez (River), Franco Moyano (Argentinos) y Lucas Romero (Independiente), por nombrar solo a los mediocampistas.

Claro que también en esta lista figuran defensores, una muestra de que los equipos que mayor posesión de pelota tienen (como River o Boca) también la hacen circular en su propio campo. El peruano Carlos Zambrano, con 455 pases en 10 partidos (85,3 por ciento), se ubica en el sexto puesto entre los más efectivos de los pases. Mientras que un puesto abajo está Emanuel Mammana, con el mismo promedio pero con 631 pases en 13 encuentros.

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Patear al arco, un rubro con sorpresas

Se señaló que River es el equipo que más intentos de remate tuvo en un partido: 28, ante Sarmiento. Y perdió. También Racing totalizó 28 pero contra Arsenal… y empató.

River es el que más remates suma por partido, 15,9, seguido de cerca por un sorpresivo Godoy Cruz, con 14,6. Detrás de ellos, el mencionado Racing y otros dos «tapados»: Tigre y Estudiantes. Pero los disparos no siempre llegan al arco, se sabe.

Si se habla de puntería, los que más aciertan a los tres palos también son Racing y River, casi empatados con 5,2 y 5,1 por partido. No es casualidad que sean la Academia y el Millonario, cumplidas 16 fechas, los equipos con mayor cantidad de goles a favor, 23 y 25 tantos, algo así como 1,43 y 1,56 por partido, respectivamente. De la mano de Retegui y compañía, Tigre se sube al podio, con 4,9 disparos al arco por partido. Y detrás de ellos se meten Boca, Godoy Cruz y Patronato, que pelea por no descender apostando al juego directo y ofensivo.

Barracas Central y su curioso récord en remates al arco

El equipo con mayor efectividad en remates al arco en un partido fue Barracas Central. Lo hizo ante Defensa y Justicia, el día del regreso a su cancha de Olavarría y Luna: el Guapo ensayó 12 disparos y 10 de ellos fueron al arco, una efectividad del 83,3 por ciento. El resultado terminó siendo para el club de Chiqui Tapia, que le ganó 3-1 a los de Varela. Barracas se llevó la victoria pero los que se le acercaron en la estadística no tuvieron la misma suerte.

En la fecha 5, Argentinos Juniors ante Arsenal también acertó 10 veces a los tres palos, pero sobre 16 intentos; mientras que en la fecha 6, Racing frente a Sarmiento de Junín también alcanzó los 10 pero en 21 disparos. ¿Otra perlita? Tanto el Bicho como la Academia, empataron.

El día que Barracas pateó 12 veces y acertó 10 tiros al arco

Los que más infracciones cometen y el partido con más faltas en el torneo

Patronato, Newell’s, Vélez, Aldosivi y San Lorenzo son los cinco equipos que más infracciones cometen por partido. Y si se cruzan estos datos con la tabla de fair play, coincidirá con la sanción que les aplican los árbitros.

El Patrón es el peor equipo de acuerdo a los puntos en la tabla del fair play: 31,3 con 39 amarillas y 6 rojas y 15,3 de promedio de faltas por partido. Y Vélez es el segundo con 31,1, con 52 amarillas (el que más tiene junto con Sarmiento) y 2 rojas y un promedio de 13,6.

Justamente, el encuentro entre Patronato y Vélez de la primera fecha está en el podio de los que más faltas tuvieron: 37, 20 de Patronato y 17 de Vélez, pero el árbitro apenas sacó tres amarillas, uno para el equipo entrerriano y dos para el Fortín.

En el primer puesto, Defensa ante Vélez, con 38 faltas, 22 de Vélez (3 amarillas por bando) y segundo también San Lorenzo frente a Central con 37 faltas, 21 del Ciclón (4 amarillas por bando). En ninguno de estos encuentros hubo rojas.

Entre los clásicos que se jugaron hasta ahora, el de Avellaneda se mostró como el más “caliente”. Y parejo. Se cometieron 37 faltas, 19 de Independiente y 18 de Racing, con un total de 9 amarillas, 6 para los de la Academia y 6 para el Rojo.

Los reyes de los tiros de esquina y los de mejor puntería en los centros

Los tiros de esquina a veces revelan las intenciones ofensivas de los equipos. Y los números deparan sorpresas. Gimnasia venció 2-0 a Patronato en La Plata, en el encuentro con mayor cantidad de córners, 18. Pero fue la visita el que más generó, 11, contra 7 del Lobo. Vélez y Sarmiento igualaron 1-1 pero el Fortín tuvo 15 tiros de esquina a favor contra 2 del Verde. También el equipo del Cacique Medina tuvo superioridad con Platense: 13 córners contra 4.

Hubo otros cuatro partidos con 17 córners: Barracas 12 – Racing 5, Gimnasia 10 – Defensa 7, Central Córdoba 10 – Patronato 7 y, el más parejo de todos, Defensa 9 – Barracas 8. En este último partido, justamente ganó el Guapo 3 a 1.

Párrafo aparte merecen los centros, ese artilugio al que se acude como recurso, estrategia o necesidad, y que a muchos equipos les marca la manera de moverse dentro de una cancha.

«No tiremos centros de mierda», les remarcaba con vehemencia Guillermo Barros Schelotto a los futbolistas de Boca cuando dirigía al Xeneize. Y el Melli, hoy técnico de la Selección de Paraguay, seguramente estaba al tanto de este número, que puede derivar en un gol si el que espera es uno de esos 9 altos y con buen cabezazo.

En la tabla de los centros, el líder es Rosario Central, con 24,5 por partido. Y en el segundo lugar hay una sorpresa, se ubica el River de Gallardo, tantas veces destacado por su fútbol asociado y de toques, también utiliza al pase aéreo como forma de aproximarse al arco rival. Estudiantes, Independiente y Banfield les siguen en el quinteto líder.

Pero una cosa es que el centro llegue y otra muy distinta es que lo atrape un jugador de nuestro propio equipo. Allí, tanto Rosario Central como River tienen saldo negativo porque no aparecen entre los líderes.

El sorpresivo puntero de esta tabla de efectividad en los centros es Central Córdoba. El Ferroviario, gracias a la puntería de sus futbolistas pero principalmente a la tenacidad de sus delanteros, especialmente de Renzo López, tiene un 30 por ciento a favor. O sea, de cada 10 centros, 3 llegan a un futbolista del equipo santiagueño. Parece poco, pero es lo que hay.

Tigre, Newell’s, Huracán, Racing, Estudiantes e Independiente marchan detrás en este ránking que parece intrascendente pero que puede terminar abriendo un partido y darle la victoria a cualquiera.

El de la valla invicta no es el que más ataja

Carlos Lampe, arquero de Atlético Tucumán, tiene un registro muy particular. Atajó en 14 de los 16 partidos del Decano, mantuvo la valla invicta en 11 y sólo recibió 6 goles. Sin embargo, no es el que tiene mejor promedio de atajadas. Es más, no figura entre los 10 primeros. Tiene un promedio de 2.4 producto de 33 atajadas en los 14 encuentros.

Leonardo Burián, ahora en Vélez y antes en Colón, encabeza la lista de arqueros con más atajadas. Jugó 8 de los 16 partidos, los 5 primeros en el Sabalero y los otros 3 en el Fortín. Con 32 atajadas totales, acumula un promedio de 4 por partido. En el segundo lugar está el pibe Sebastián Meza, de Sarmiento, con un promedio de 3,7 (59 atajadas en 16 encuentros).

Tampoco Rodrigo Rey, arquero de Gimnasia, el segundo equipo con más vallas invictas (10), está en el top ten de atajadores. El jugador tripero tiene un promedio de 2.8 con 45 paradas en las primeras 16 fechas.

Los números no mienten

En el fútbol argentino, queda demostrado, el que más ataca o propone un juego ofensivo, no siempre gana. Por eso algunos afirman, con cierta razón, que se trata de uno de los torneos más difíciles, que se lucha más de lo que se juega, con figuras del exterior que no prosperan y entrenadores que vuelan de sus cargos semana tras semana.

ESPECIAL CLARÍN

Fuente:Oscar Barnade  Clarín.com Deportes – Foto: Clarín.com Deportes – Videos: TNT Sports Argentina – You Tube – Clarín.com Deportes