En el Gran Premio de la Fórmula 1 de Abu Dhabi, la vigésima segunda y última carrera de la temporada, ya no estaba en juego el título. El neerlandés Max Verstappen (Red Bull) disfruta, desde principios de octubre (en Japón), del bicampeonato. Por ello, el interés en el circuito de Yas Marina estuvo puesto en quién sería el subcampeón: el mexicano Sergio Pérez, segundo piloto de Red Bull, o el monegasco Charles Leclerc, de Ferrari. Y fue este último, el piloto de la escudería italiana, quien se impuso y terminó generando un sacudón positivo para los de Maranello en medio de tantas críticas.

Verstappen celebró su tercera victoria consecutiva, su decimoquinta de la temporada, una cifra récord en la máxima categoría, pero Red Bull no pudo festejar con Checo Pérez, que llegó igualado en puntos con Leclerc al último desafío. El monegasco terminó segundo en el Campeonato de Pilotos, escenario que se repitió con Ferrari en la Copa de Constructores (por detrás de Red Bull) gracias, también, al cuarto puesto obtenido en Abu Dhabi por el español Carlos Sainz.

Leclerc resistió el acoso en el tramo final de Pérez, con el que llegó empatado en 290 puntos en la tabla general, y logró confirmar su segunda posición final en el Mundial. Tanto se ha criticado a Ferrari por sus fallos de estrategia durante el año, pero en esta oportunidad, en la escudería italiana todo salió como esperaban. En la vuelta 34, a 24 del final, Red Bull decidió -de forma abrupta- ingresar al mexicano en boxes, en lugar de esperar a ver lo que hacía Ferrari con Leclerc, pero la acción fue equivocada, lo aprovechó el monegasco (tuvo una sola parada contra dos de su rival) y frustró el intento del equipo Red Bull por hacer el 1-2 en el final de la temporada

El subcampeonato de Leclerc puede parecer un premio menor, pero sin embargo deja un buen sabor de boca para los de Maranello y representa cierto alivio para un cuestionado Mattia Binotto, del que no se sabe a ciencia cierta si seguirá como ingeniero en 2023.

Asimismo, el siete veces campeón del mundo, Lewis Hamilton vio frustradas sus esperanzas de mantener intacto su récord de ganar una carrera cada temporada por un fallo en el sistema hidráulico. El británico entró en boxes para retirarse a falta de pocas vueltas para el cierre de la prueba.

El español Fernando Alonso, mientras tanto, consumó su sexto abandono del año después de que su motor dijese basta en la vuelta 28, una triste despedida de su tercer paso por Renault, ahora como Alpine.

La 22a y última prueba de F1 del año

Esta vigésima segunda prueba de la temporada de Fórmula 1 también marcó el último Gran Premio del cuatro veces campeón del mundo alemán, Sebastian Vettel (Aston Martin).

Fuente: LA NACION – Fotos: Hussein Malla – AP – KARIM SAHIB – AFP – LA NACION Deportes – Tweets:Formula 1@F1 – LA NACION Deportes – Video: – LA NACION Deportes