/Las 10 coincidencias tácticas entre los equipos de Bielsa y Guardiola (y algunas diferencias)

Las 10 coincidencias tácticas entre los equipos de Bielsa y Guardiola (y algunas diferencias)

Se admiran mutuamente, se escuchan, se elogian. Incluso palpitan lo que será el enfrentamiento táctico en la próxima Premier League entre Leeds y Manchester City. Marcelo Bielsa y Pep Guardiola se toman como referentes el uno del otro, se sientan en un cómodo sillón para ver cuando juega el equipo del otro entrenador, analizan qué cosas pueden copiar, adaptar a sus necesidades. Más allá que los emparenta el rol docente, el sentido de la motivación, cómo convencen a los jugadores del plan trazado, la intensidad con la que entrenan y juegan y que mejoran a todos los jugadores que pasan por ellos desde el aspecto individual pero en función (también) de una estructura de equipo, ¿qué coincidencias tácticas se pueden encontrar entre ambos? Veamos algunas:

1-Las salidas desde el fondo: ambos arrancan desde el principio, tratando de tener un arquero que, además de tratar de atajar las pelotas que van en dirección al arco, tengan una buena técnica con los pies. Tanto Bielsa como Guardiola suelen entrenar más de 20 formas distintas para salir desde el fondo, variables según el adversario vaya presionando o tapando a los posibles receptores de ese primer pase. Y aunque jueguen con línea de 4 realizan el movimiento inicial para quedar posicionados con 3 más el arquero. Si los N° 1 suelen jugar bien con los pies, potencian ese recurso, ya que en un momento tendrán que buscar un pase largo también.

2-Defender mano a mano desde los centrales y a la altura del círculo central: de ser posible, arrancar así y trasladando a duelos individuales en toda la cancha. «Mi sueño futbolístico es meter a los once contrarios dentro de su área desde el primer minuto y no dejarlos pasar del medio campo. Pero bien, para conseguirlo hay que ser muy preciso. Como muy bien dice Marcelo (Bielsa) ‘todo el mundo defiende espacios cortos y ataca espacios grandes. En cambio, yo quiero atacar espacios pequeños y defender espacios grandes’. Claro. Si uno o dos del equipo no lo hacen bien, se acabó. Pero si todos lo hacen bien, yo intento meterte en tu área y que no consigas oler el balón durante todo el partido. Eso lo aprendí de Bielsa», dijo Guardiola mientras dirigía a Bayern Munich.

3-Por lo general utilizan extremos y usan todo el ancho del campo: primero amplitud para generar triangulaciones y luego aceleración para ser profundos. Ya sea partiendo desde un 4-3-3 o 4-1-4-1, o volcados en ataque con un 2-5-3, ambos entrenadores tienen debilidad por los wines o mediocampistas que sean picantes en los últimos metros, además de pretender formar tándems con sus laterales. Quieren que sus laterales se proyecten y terminen ellos en posiciones de centro-gol en ¾ para no sólo abrir el campo, sino también sumar varias asistencias por campeonato.

4-Presión alta al rival: sus tres jugadores más adelantados pueden estar parados directamente sobre la línea del área adversaria. Y el resto del equipo, acompañando ese posicionamiento de los «punta de lanza». Desde ahí también se ven los duelos mano a mano para presionar y buscar recuperar en el sector que sea, en función de dónde decida jugar el primer pase el arquero del contrario.

5-La presión tras pérdida para buscar recuperar en los 5 segundos posteriores: la reacción de los equipos de Bielsa ante la pérdida de la pelota suele ser asfixiante y decidida, lo hace llevándolo al extremo. Pep involucra a los jugadores que fueron sumando pases y se escalonaron sobre ese sector donde el equipo decidió atacar, hasta prefieren las bandas para jugar con las líneas del campo como aliados para encerrar a los defensores que pudieron haber recuperado ese balón. En el caso de los equipos de Guardiola, si la pelota se le va de ese sector específico, podría ser un problema.

6-Les gusta jugar con un solo 9: más allá de que Pep, en Alemania, utilizó el doble 9 en algunos momentos con Mandzukic y Müller (hasta poniéndolos con Robben y Ribery a los costados cuando terminaba atacando 2-4-4), de los 25 sistemas tácticos que suele tener en su valija, apenas cuatro encajan con un doble 9. En Inglaterra, cuando conviven en Manchester City Sergio Agüero y Gabriel Jesús, el brasileño suele moverse como volante por izquierda o extremo en un 4-1-4-1. Puede arrancar el partido con dos N° 9, pero uno casi seguro jugará readaptado.

Gabriel Batistuta y Marcelo Bielsa en un entrenamiento de la selección argentina; durante esa etapa, era él o Crespo; el DT no quiso ponerlos juntos: con el Loco juega un solo 9
Gabriel Batistuta y Marcelo Bielsa en un entrenamiento de la selección argentina; durante esa etapa, era él o Crespo; el DT no quiso ponerlos juntos: con el Loco juega un solo 9 Fuente: AFP – Crédito: Daniel García

Bielsa prefiere un 9 con características de 9-9 (Bamford; Ariel Cozzoni en Newell’s; Batistuta o Crespo en la selección o el propio Martín Palermo en la Copa América del 99; Gignac en Marsella; Llorente y Aduriz en Bilbao), pero se adapta si tiene que poner allí a otro futbolista con otras características, como hizo con Patricio Camps en Vélez o Tevez en los Juegos Olímpicos de 2004.