El equipo de Abel Balbo volvió a hacer un gran partido: le ganó 3-0 al Tomba con un doblete de Alejandro Martínez.

Central Córdoba le ganó a Godoy Cruz por 3-0 en uno de los partidos correspondientes a la fecha 18 de la Liga Profesional de Fútbol. Uno de los duelos claves por la permanencia en la Primera División.

Fue un partido friccionado y duro bajo el sol santiagueño en el estadio Único Madre de Ciudades. El Tomba llegó al cotejo necesitado de puntos para no perderle pisada a los líderes, Atlético Tucumán y Gimnasia de la Plata, y con la idea de aprovechar el tropiezo de Huracán, que empató con Tigre en la noche del viernes. En Mendoza está permitido soñar.

Por su parte, el Ferroviario, que hacía tres partidos no sumaba de a tres, entró al juego de su necesidad: sumar la mayor cantidad de puntos posibles para alejarse de los puestos de descenso. La otra tabla, la que a Balbo le importa, es la de los Promedios. Y es imperioso ganar para permanecer en la máxima categoría del fútbol doméstico.

Durante el primer tiempo el local ganó la batalla en el mediocampo. El Ferroviario se ordenó bien tácticamente con dos líneas de cuatro y dos puntas que no dejaron que el rival genere juego con facilidad. El conjunto santiagueño le fue fiel a su planteo desde el comienzo y el Tomba nunca encontró la solución.

Para aumentar el dolor de cabeza de la dupla Gómez-Orsi, que vieron a los suyos ser superados desde el inicio y sin poder reaccionar, el primer gol del local llegó luego de una buena jugada.

Juan Cruz Kaprof abrió el juego por la izquierda y encontró libre a Lautaro Montoya. El lateral metió un centro con rosca que pareció buscar a Renzo López. Pero luego del resbalón del oriental, Alejandro Martínez remató con un potente zurdazo que venció al arquero Diego Rodríguez y puso el 1-0 a los once minutos. Se fundió en un abrazo con sus compañeros y a sacar desde el círculo central. El partido seguía y todo podía pasar.

La dupla técnica del Tomba metió dos cambios antes del entretiempo tratando de buscar la reacción de los suyos. Pero Godoy Cruz se fue a las duchas siendo superado y sin poder plasmar en el verde césped el planteo táctico original.  

El buen partido del equipo de Balbo pareció ser una cachetada para el ánimo de los mendocinos. Durante el comienzo del complemento el arquero Rodríguez se erigió como estandarte de la visita ante los embates del local que buscaban el segundo tanto con alma y vida.

Pero a los 13 minutos otra vez lastimó el equipo de Santiago del Estero. Renzo López se redimió y de cabeza marcó el segundo luego de un gran tiro de esquina ejecutado por Iván Ramírez desde el costado izquierdo. El oriental se deshizo de su marca por el segundo palo y con un gran gesto técnico cabeceó el balón al palo contrario. Así, infló la red poniendo en el tanteador una diferencia de dos. Parecía imposible que al local se le escape la victoria.

El Tomba tuvo sus chances de gol, pero el arquero Rigamonti respondió a la altura. Cuando parecía que el descuento de los mendocinos estaba al caer, un penal le dio la posibilidad de ampliar el marcador al local.

Fue Alejandro Martínez quien marcó desde los doce pasos el tercero de Central Córdoba y selló la suerte de Godoy Cruz. El volante anotó así, el segundo en su cuenta personal y encaminó la victoria definitiva.

En un duelo clave por los Promedios, el Ferroviario se llevó tres puntos que valen oro y al Tomba se le escapó una chance inmejorable para soñar con gritar campeón. Quedan nueve fechas imprevisibles donde todo puede pasar.