Los de Falcioni lograron su tercera victoria en la Liga consecutiva que se suma a la de Copa Argentina. Un golazo de Romero fue la diferencia para que el Rojo continúe en aguas mansas.

En una Liga Profesional inestable, con equipos que cambian de rendimientos y de resultados de una jornada a otra, este Independiente de Julio Falcioni encontró pequeñas certezas. Y lo hizo a partir del combustible ideal que revitaliza cualquier cuestión en el fútbol: ganar. En Santa Fe batalló, luchó, friccionó y jugó (poco) pero convencido. Un nuevo paso adelante desde la confianza (así lo explicó el autor del gol de la noche) pero que encuentra en las matemáticas el mejor negocio: cuatro triunfos en fila (si se cuenta la victoria ante Vélez por la Copa Argentina) en los que marcó ocho tantos y solo le convirtieron uno. Entonces, en una competencia irregular, lo de Independiente le permite escalar y subir en una tabla anual que parecía haberla olvidado para relojearla ahora y encontrarse a 7 puntos de un boleto a la próxima Copa Sudamericana.

¿Se trató de una victoria contundente, con juego asociado y en la que impuso las condiciones? No. Pero siempre lució mejor plantado Independiente (vestido de negro) en un terreno poco amigable como el de Unión. Y si bien es cierto que el gol ganador lo marcó por un derechazo inatajable de Lucas Romero desde afuera del área en el inicio del segundo tiempo, ya en la primera mitad había acumulado méritos el conjunto de Falcioni. En ese rato del primer tiempo tuvo en el desequilibrio de Leandro Fernández su pieza ofensiva de mayor riesgo, volcado por el sector izquierdo del ataque. Y en dos ocasiones les sirvió el gol a Batallini y a Pozzo con centros filosos, pero ninguno llegó a conectar.

La tarea de Marcone (en levantada después de hacer un reacondicionamiento físico) desde la mitad de la cancha también le ofreció a Romero otro tipo de libertadores en el partido. Y más aún porque Unión, en su búsqueda de trepar con los laterales con Esquivel y Vera, se olvidó de prestarle atención a lo que sucedía en el círculo central. Por eso la visita se posicionó cómodo, en un partido con fricción, choques, protestas, quejas y poco conexiones ofensivas de riesgo. De hecho Milton Álvarez recién tuvo participación relevante en el último cuarto del juego, cuando le sacó un remate débil a Peralta Bauer y una todavía mejor a Tomás González en la que un pique alto lo había complicado. Nada más.

https://twitter.com/DataRef_/status/1572001986379227136?ref_src=twsrc%5Etfw%7Ctwcamp%5Etweetembed%7Ctwterm%5E1572001986379227136%7Ctwgr%5E42574b9d0821d2528c030973a0e37ad03f2d46e8%7Ctwcon%5Es1_&ref_url=https%3A%2F%2Fwww.clarin.com%2Fdeportes%2Funion-santa-fe-vs-independiente-liga-profesional-previa-tv-probables-formaciones_0_KdmyULPs9J.html