El equipo capitaneado por Guillermo Coria disputa el repechaje por el Grupo Mundial I, buscando un boleto en los Qualifiers de 2024.
Francisco Cerúndolo abrió el repechaje de la Copa Davis entre la Argentina y Lituania, sobre el polvo de ladrillo del Buenos Aires Lawn Tennis Club, con el compromiso y la carga emocional extra de tener que debutar como local siendo el mejor singlista rankeado de la serie y ante un rival que hasta el año pasado jugó en la categoría junior. Es decir, con más para perder que para ganar. Ese compromiso le pesó. Por momentos, el número 21 del mundo demostró la amplia diferencia de jerarquía, pero también tuvo que atravesar momentos muy tormentosos: finalmente derrotó a Vilius Gaubas (18 años, 476°) por 6-1, 6-7 (6-8) y 6-2, en 2h30m. Así, el equipo nacional dio el primer paso (1-0) en el repechaje del Grupo Mundial I, en busca de un boleto para los Qualifiers de febrero próximo.
El bonaerense Sebastián Báez (28°) y Ricardas Berankis (231°, 33 años, 50° en 2016) disputan el segundo punto de la serie. La competencia seguirá este domingo, desde las 11, con el punto de dobles (Andrés Molteni y Máximo González será la pareja nacional). Luego están programados dos singles.
Con un escenario central radiante (por el clima) y completo desde las tribunas (por unas cinco mil personas), Cerúndolo pegó primero y rápido, quebrándole el servicio a Gaubas en el game inicial del match. En su tercera convocatoria a la Copa Davis (la primera en nuestro país), la mejor raqueta sudamericana del ranking le marcó la cancha a un joven rival al que el polvo de ladrillo no le es ajeno: de los 21 torneos profesionales que actuó en la temporada, 16 fueron sobre superficie lenta (ganó dos Futures, ambos sobre clay). Más allá de todo, el porteño se adueñó del primer set en solamente 31 minutos: la velocidad de sus tiros fueron incontrolables para la resistencia de Gaubas.
Luego de semejante demostración tenística (y de personalidad), todo indicaba que Cerúndolo cerraría el partido con la misma autoridad demostrada hasta entonces. Sin embargo, los demonios internos lo perturbaron. Entró en juego la tan temida tensión. Gaubas, con frescura y desparpajo, se soltó y empezó a arriesgar (y a acertar) más, con tiros profundos. El argentino, entrenado por Kevin Konfederak, empezó a maldecir, a sufrir; el europeo se agrandó. Gaubas llegó a sacar para set (5-4), pero le pesó la responsabilidad y Cerúndolo le quebró (5-5). En el undécimo game sacó mal, el lituano tuvo cuatro chances de rompimiento, pero -al final- el argentino sostuvo su saque (6-5). Gaubas sacó sin margen de error, Cerúndolo lo presionó y le hizo sentir el compromiso; el lituano sirvió 15-30, pero pudo frenar el impulso del mayor de los hermanos Cerúndolo y llevó el segundo set al tie-break.
Cerúndolo martilló y tuvo match point, sacando 6-5, pero tiró una derecha afuera (6-6). El argentino volvió a sacar y subió a la red para cerrar el punto, pero Gaubas lo pasó de drive (7-6) y, para sorpresa del público en el BALTC, ganó el set (8-6). Se sintió el cimbronazo en la Catedral del tenis argentino: muchos se quedaron callados. También lo sufrió el capitán argentino, Guillermo Coria.
Gaubas arrancó el tercer parcial con su servicio, envalentonado, pero quedó muy complicado rápidamente: 0-40. Sin embargo, Cerúndolo no supo cómo aprovechar la oportunidad y el lituano terminó resolviendo el game (1-0). El argentino ganó su turno de saque (1-1) y tuvo una chance de quiebre en el tercer game: esta vez sí lo consiguió (2-1) y se desahogó, levantando los brazos al público. Francisco sumó con su saque (3-1) y otra vez lo hizo dudar a Gaubas. Cerúndolo empezó a aflojarle la pelota al rival, por momentos se calmó, hizo buenos cambios de direcciones y le quebró, una vez más, el saque (4-1). Cualquiera podría imaginarse que, ahora sí, Cerúndolo había encaminado el partido, pero sacó 15-40 y los fantasmas volvieron a sobrevolar el ambiente del BALTC. Claro que Gaubas no supo cómo subirse a ese último vagón de tren y Cerúndolo sostuvo su servicio (5-1). El lituano sintió el impacto y el argentino tuvo un segundo match point…, que no aprovechó. Gaubas, un optimista, siguió aferrándose de la inestabilidad del local y estiró el partido (2-5).
Cerúndolo sacó para partido. Se adelantó 40-0. Pero Gaubas siguió complicándolo y recortó la distancia (40-30). Tenso, el porteño cometió una doble falta (la octava del partido) y llegaron al deuce. Cerúndolo tuvo match point por sexta vez y, por fin, Gaubas se equivocó tirando larga una derecha y el argentino pudo quitarse un gran peso de encima. Así, con más obstáculos de los esperados, el favoritismo del equipo argentino empezó a anotarse sobre el resultado. Los albicelestes dieron el primer paso.
La Copa Davis es el evento tenístico en el que, muchas veces, el ranking no importa tanto y en el que se producen más sorpresas de las habituales. “Jugar por el país” hace que entren en escena otros matices emocionales y no todos los jugadores reaccionan con la misma fortaleza anímica con la que están habituados en el tour. Cerúndolo, por momentos, padeció el partido, pero pudo resolverlo y se marchó del court central del BALTC levantando los brazos.
🎾 ¡EL PRIMER PUNTO FUE PARA ARGENTINA! 🇦🇷
Francisco Cerúndulo venció al lituano Villius Gaubas por 6-1, 7-6 y 6-2. El equipo nacional comenzó con el pie derecho su camino rumbo a la fase de clasificación a la Copa Davis 2024. 💪 pic.twitter.com/DnSs9cuR6s
— TyC Sports (@TyCSports) September 16, 2023