En Santiago del Estero, el equipo de Rondina se impuso con un gol de Vega, desde afuera del área; en la próxima fecha, los dirigidos por Falcioni recibirán a Boca.

Noche negra de Independiente en Santiago del Estero. Noche para el olvido. Perdió y no sumó puntos para entrar en la próxima Libertadores, su último gran objetivo del año. En el quinto duelo entre ambos, Central Córdoba le hizo el primer gol de la historia y le ganó por 1-0. ¿Los otros resultados? Independiente goleó 6-0 en el 67, 3-0 en la Superliga 2019-20, venció 1-0 el año pasado y además en 2020 igualaron 0-0.

La Copa Sudamericana, claro, no resulta premio suficiente para calmar la saciedad en el mundo rojo. Independiente, que allá lejos y hace tiempo, en los primeros tramos del campeonato, formó parte del selecto grupo de protagonistas en la lucha por el título, una vez que perdió ese tren le apuntó a la puerta que abre el ingreso en la próxima edición de la Libertadores. Y así se presentó en Santiago del Estero el conjunto de Julio César Falcioni; con la ilusión de acceder a la Libertadores pegada como una estampilla en la frente. Pero fue una sombra toda la noche y perdió.

El gol de Vega

El equipo santiagueño, parado en el sótano de la tabla, venía de vencer por 3 a 1 ante Sarmiento, en Junín, después de una cadena de 8 encuentros sin triunfos. Y claro, necesita sumar y sumar el equipo de Sergio Rondina si pretende mejorar su demacrado promedio en la próxima temporada, en la que retornarán los descensos.

Con “Saltita” González en lugar de Alan Soñora, quien se desgarró en el ensayo del jueves, Independiente arrancó su camino por los tres puntos, como para continuar por la vereda ganadora luego de aquel 3-0 sobre Arsenal en la fecha anterior, antes del receso por la doble fecha FIFA. Y fue sobre el arco de César Rigamonti el equipo de Avellaneda en la noche del Madre de Ciudades. Eso sí, de entrada el local también mostró sus garras y pudo incomodar a su rival, sobre todo a través de la movilidad de Milton Giménez, goleador y as de espadas del Ferroviario.

Mientras oficialismo y oposición siguen dibujando puntos suspensivos con vistas a las elecciones del 19 de diciembre (más allá de la presentación formal de la lista  encabezada por Fabián Doman), en Independiente representaría un golpe importante terminar el año sin entrar en la Libertadores. Un golpe en la autoestima, pero también en los números de la tesorería que bastante dolor de cabeza prometen causarle a la nueva conducción. Por eso, aunque esté lejos de River y de la cima, cada presentación, cada punto en juego, resulta clave para el cuadro de Avellaneda. Desde lo futbolístico y desde lo institucional.

Tanto Lucas Melano desde la derecha, como Jonathan Bay desde la izquierda, buscaron en el inicio inquietar con centros al área de Sebastián Sosa. Cuando pareció encenderse Independiente y llegó con profundidad, Silvio Romero convirtió un gol que Fernando Echenique anuló por posición adelantada cuando habilitaba Bay. El local, además de Giménez, se sostenía con el despliegue de Alejandro Martínez y con el orden de las dos líneas de cuatro; Independiente jugaba contrariado, con fastidio, después del tanto anulado a Romero. En este contexto, el cero a cero no se movía un ápice de su lugar.

Hasta que Vega sacudió la noche con un golazo desde afuera del área. 1-0. Para meterse en la historia de Central Córdoba ante Independiente. Para colmo, Lucas Romero ya había recibido la quinta amarilla y no podrá jugar el miércoles frente a Boca. Una nimiedad al lado de todo lo que perdió Independiente.