Atlético Tucumán pisó el freno en Paraná, cayó 2 a 1 con Patronato y les subió la temperatura a las últimas fechas de la Liga Profesional. Con goles de Mateo Coronel, el Decano pegó primero y se puso en ventaja a los 4 minutos de juego. Pero el Patrón reaccionó rápido y empató las acciones a los 15, por intermedio de Marcelo Estigarribia. En tanto, a los 20m del complemento, Sebastián Medina inclinó la balanza para los locales.

Se dio un partido muy entretenido en Paraná, con un final electrizante. A lo largo de los 90 minutos Patronato fundamentó sus buenas intenciones futbolísticas que propone desde que Facundo Sava es su entrenador. Aun cuando el peso de malas campañas anteriores hipotecan su futuro, con destino casi sentenciado de Primera Nacional.

Fueron esas herramientas las que le permitió al conjunto local golear a Boca 3 a 0 a fines de julio y eliminar por penales a River de la Copa Argentina el miércoles de la semana pasada, después de un electrizante 2 a 2 en La Rioja.

Lo mejor del partido

Al equipo que conduce Lucas Pusineri le costó doblegar a Altamirano, y la realidad que expuso las estadísticas del juego determinaron que Carlos Lampe tuvo muchísimo más trabajo y un rol fundamental para sostener los embates de Patronato, hasta el tanto de Medina. Más claro: sin las atajadas del boliviano, el triunfo local hubiera sido menos sufrido.

Con este resultado Atlético Tucumán es puntero con 41 unidades, seguido por Racing con 40, Boca (que desde las 18 recibía a Vélez) 39, y Huracán y Gimnasia, con 37. A falta de cinco fechas por jugarse, los resultados parciales parecen haber favorecido a la Academia, hasta el momento el único del top 5 de la tabla que pudo sumar de a tres, luego de su épica remontada (perdía 3 a 1 y venció 4 a 3 a Rosario Central).

A Patronato la alegría del triunfo le genera una nueva inyección anímica, y el hecho de salir de la última posición en la tabla de promedios.

La presión y la responsabilidad empezaron a jugar su partido en Atlético. Que por un lado ya no sorprende en los primeros lugares líder del torneo argentino, pero a la vez su falta de costumbre en este rol protagónico puede hacerlo tambalear en los momentos menos recomendables.

El equipo que dirige Pusineri, quien pasó un mal momento esta semana al sufrir un violento robo su familia que vive en Buenos Aires, tendrá que demostrar su capacidad de reacción para seguir entusiasmado con la posibilidad histórica de consagrarse campeón por primera vez en su historia.

Para ello, será clave su actitud ante su público el próximo miércoles, cuando reciba a Platense. Su notable campaña, con apenas tres derrotas y una eficacia del 75% sin derrotas de local, le ofrece sostenes en los cuales apoyarse luego de este traspié.

Restan cinco fechas y todo puede pasar. Tras el Calamar, tendrá una prueba de fuego cuando visite a Racing en Avellaneda. Luego recibirá a Rosario Central y Unión, y cerrará con Defensa y Justicia en Varela. Atlético Tucumán sigue enfocado en dar la vuelta olímpica, aun cuando sabe que en Paraná condicionó a otros resultados sus propias ilusiones.