En el cierre de la 20° fecha del campeonato, en el choque entre Battaglia y Palermo, dos símbolos xeneixes, el conjunto de la Ribera se impuso con claridad por 3 a 0 y está más cerca de la Libertadores 2022.

Una noche perfecta. Boca se impuso por 3 a 0 sobre Aldosivi, en Mar Plata, en una actuación que provoca el aplauso y abre la esperanza hacia el futuro. Brillaron Villa y Cardona (cada uno marcó un gol) y volvió Toto Salvio, que en poco más de media hora demostró que está intacto.

Boca tiene como objetivo hasta fin de año asegurar su clasificación para la Copa Libertadores 2022 y una vía para ello es mediante la tabla anual. El triunfo, la goleada, es revitalizadora rumbo a ese objetivo. Boca, verdaderamente, jugó muy bien.

Lo mejor del partido

El partido tuvo como particularidad el enfrentamiento en los bancos de dos glorias xeneizes que compartieron el ciclo dorado de Carlos Bianchi: Sebastián Battaglia, el futbolista más ganador de la historia de Boca y que este lunes cumple 41 años, ante Martín Palermo, máximo goleador, con 236 goles en 404 encuentros. Hubo una cálida ovación para el Titán e, inmediatamente, se reencontraron en un abrazo.

Al mismo tiempo, Aldosivi vendió unas 7000 entradas para el público en general, por lo que la tribuna visitante tuvo el color de la hinchada de Boca, a pesar de que todavía está en estudio el regreso de las dos parcialidades. Se les pidió, especialmente, que no llevaran indumentarias xeneizes, pero pocos lo respetaron. Arrojaron globos azules y amarillos, lo que provocó cierta nostalgia de los tiempos en los que los escenarios convivían con hinchas de los dos conjuntos.

Boca abrió el marcador a los 15 minutos, con un cabezazo de Almendra, luego de un primer impacto, un derechazo violento, que chocó contra el travesaño. El encuentro se jugaba a todo ritmo y, en ese contexto, el conjunto visitante estaba más afilado, provocaba más peligro. El desarrollo siguió abierto, atractivo, para cualquiera de los dos equipos. Hauche y Cauteruccio pudieron empatarlo; cada aproximación de Boca llevaba peligro real.

Otra vez como titular, Villa expuso velocidad y precisión por el sector derecho. Un disparo chocó contra el travesaño, cuando tenía aroma de gol. Rápido, punzante, no podía ser controlado por la dubitativa última línea de Aldosivi, que de todos modos se las ingenió para avanzar, para creer que el empate era posible. El conjunto local trata muy bien la pelota, pero le suele faltar puntería en los metros finales. En el ida y vuelta constante, Devecchi le tapó un mano a mano a Montes, luego de un pase de Lisandro López

No sólo Villa (cumplió 100 partidos con la camiseta xeneize) tuvo un buen nivel. Los otros colombianos, Cardona y Fabra, también pisaron fuerte en Mar del Plata. Merecía Boca el segundo grito, estaba al caer, por peso propio. Desbordado y errático, Aldosivi mostró que tiene orgullo: en el final del primer capítulo, una bomba de Maciel fue devuelta por el travesaño. Nunca bajó la intensidad.

El espectáculo fue interesante, también, en el tramo final. Boca estaba al acecho, Aldosivi intentaba con sus humildes armas. Vázquez marcó el segundo -tiene el olfato y el optimismo de Palermo-, pero estaba apenas adelantado, por lo que la acción fue anulada. Y entre todos, Villa y Almendra exhibieron su mejor versión, más punzante, con oficio y cómplices en el juego de ataque. El volante, desgastado, fue reemplazado por Toto Salvio, que volvió a la primera de Boca luego de 253 días, recuperado de una severa lesión.

Y en una acción que resolvió muy bien Salvio por el sector derecho (salió la pelota, antes de enviar el centro), Boca elevó la cuenta. La pelota derivó en Villa, que encontró una excelente respuesta del arquero, pero en el rebote, Cardona definió cruzado, imposible para Devecchi, una de las figuras de la noche. Salvio actuó por la banda, como en las viejas épocas, como un número 7 retrasado.

Al rato, tuvo un disparo de zurda, desde la derecha al centro. Toto mostró en poco tiempo, mucho del talento que siempre tuvo, pero que no expuso en toda su dimensión en su paso por Boca, más allá de las dolencias físicas. Un zurdazo con ímpetu casi se convierte en el 3-0: volvió como si no hubiera tenido una eterna inactividad.

Los tímidos intentos de Aldosivi en el final del encuentro fueron bien resueltos por Rossi, que luego del despiste en la derrota con Gimnasia tuvo dos buenas actuaciones. La anterior, contra Argentinos Juniors, por la Copa Argentina. En el final, Villa selló la goleada y su muy buena tarea. Boca tuvo una noche perfecta.